INJUSALUD es una asociación sin ánimo de lucro que nace aproximadamente hace un año, en octubre de 2021, con CIF: G-06843767, cuya sede oficial reside en Chauchina (Granada), concretamente en la C/Ronda Exterior, 3 (edificio CIE, Guadalinfo), también contamos con otra sede en Granada capital junto con nuestra asociación hermana GranaBIP, se encuentra en C/Chile, 10 (frente la comisaría).
El proyecto de INJUSALUD, cuyas siglas significan Infancia y Juventud Saludable, nace con el fin de brindar una atención y un apoyo a aquellas personas que presentan diversas situaciones complicadas en relación a trastornos o problemas de índole mental y/o psicosocial en edades comprendidas entre los 6 y 17 años
Pero… ¿Qué es exactamente la salud mental? Cuando hablamos de salud mental no solo nos referimos a la ausencia de enfermedad, sino también al equilibrio que experimenta la persona con su entorno, es decir, la salud mental es un “estado completo de bienestar físico, psíquico, emocional y social”.
Todos y todas tenemos problemas o vivimos situaciones complicadas a lo largo de nuestra vida, desde que somos niños hasta cuando somos muy mayores; y a veces no sabemos qué hacer, cómo actuar o si debemos pedir ayuda. Otras veces nos comportamos mal con las personas que están a nuestro alrededor y con nosotros mismos, sin saber muy bien por qué hacemos lo que hacemos. Todos estos problemas, dudas y comportamientos, suelen estar relacionados con las emociones y con cómo las vivimos. Debemos entender que no hay “emociones buenas y malas”, pueden ser “agradables” o “desagradables” según las sensaciones fisiológicas que nos provoquen. Todas realizan funciones importantes en nuestra vida, con todas aprendemos. No obstante, pueden aparecer comportamientos inadecuados debido a una mala o desadaptativa gestión emocional.
¿Por qué surge injusalud?
El reconocimiento y tratamiento temprano de las dificultades a nivel psicosocial en menores es de vital importancia.
INJUSALUD supone una pieza significativa en la intervención y rehabilitación del colectivo y sus familias. Además, las medidas preventivas que se puedan llevar a cabo serán claves para el desarrollo evolutivo adecuado en etapas posteriores de su vida.
Nuestro principal fin es promover la agrupación de los y las menores y sus familias, así como las personas afines, simpatizantes y colaboradoras, para poder trabajar en las necesidades y derechos de las personas afectadas y su entorno más cercano.
Es importante destacar que no hay menores “malos y problemáticos”, sino sistemas educativos en la familia y en la escuela o en la sociedad más amplia que no saben responder a las necesidades de ese/a menor, en cada etapa de desarrollo. La esencia de la intervención en los problemas de conducta es no centrarnos en los problemas; sino ayudar a los/as menores con problemas de conducta a tener un comportamiento más adaptativo, dedicando más tiempo y esfuerzo al comportamiento positivo que al comportamiento problemático.
Las intervenciones prometedoras en los problemas de conducta indican que, para atajar estos problemas, se deben interrumpir los patrones de interacción disfuncionales, que se generan como consecuencia del trastorno en los ámbitos más relevantes para el desarrollo del o de la menor. Para ello, es necesario un cambio de mentalidad y de práctica educativa, tanto en la familia como en la escuela, desde un modo reactivo, punitivo y excluyente a prácticas proactivas, en las que prime el refuerzo positivo y el aprendizaje.
Más info: https://revistas.comillas.edu/index.php/padresymaestros/article/view/3071/2931
